Todo apuntaba a que íbamos a disfrutar de una gran noche, pero el agua hizo que todo se estropeara y que cada cofradía tomara sus decisiones apresuradamente.
Cuando la Cruz de Guía del Santo Crucifijo transitaba por la calle San Miguel empezaron a caer gotas que poco a poco fueron formando un fuerte chaparrón, la misma llegó a la calle Caballeros, al tiempo el Cristo de San Miguel llegó a esta calle se dió la vuelta y retornó al Templo de San Miguel, a la Virgen de la Encarnción le cogió en la puerta de la Iglesia y volvió a entrar.
En la Plazuela el misterio de la Sentencia caminaba por la calle Empedraba y obsevando que las gotas de agua eran intensas también retornó a la Ermita de la Yedra, la Esperanza no había salido todavía.
Las Cinco Llagas retrasaba la salid en media hora pero al ver que no llovía salió a la calle, en el transcurso de su transitar hasta llegar a la Carrera Oficial le sorprendieron varios chaparrones, pero siguió su camino y llegó a concluir su Estación de Penitencia completa.
La Buena Muerte viendo lo que se avecinaba y lo que le ocurrió el año anterior decidió no salir.
Y el Nazareno, estuve con esta Hermandad en la salida de la misma, esto sabe a antiguo, algo muy jerezano y que los hermanos de esta cofradía mantienen durante años de historia y que no quieren cambiar porque tiene su solera. Es impresionante ver minutos antes de la salida como se saludan los hermanos de la misma, la llegada de las hermanas con sus familiares, los momentos díficiles mientras se reunía la Junta de Gobierno, llovía pero la hermandad se echó a la calle, con prisa llegó a la Catedral y luego retornó a su templo con rapidez, por loque no le llovió.
Por la tarde más de lo mismo que llueve, que no lo hace, que al final salimos a la calle.
Las Viñas salió a la calle, cuando yo estaba disfruntado de lo que es el andar de una cofradía en la calle y lo ligera que pasa esta hermandad, el paso arrió en la Calle Zaragoza se levantó pero la sorpresa es que el paso, debido a un chaparrón, volvió sobre sus pasos y dió la vuelta en la Calle Circo para seguir a su Madre de la Concepción Coronada que recogía en la Parroquia de Fátima. Pasado unos minutos la misma volvió a la Parroquia de las Viñas.
Las Hemandades de Loreto y el Santo Entierro no salieron debido a la lluvia que se avecinaba.
El Cristo salió como siempre, saludó a la Esperanza en la Yedra siguió su camino, esta cofradía coge un tramo de Carrera Oficial para seguir por la calle Tornería, pero en esta ocasión no abandonó la misma hasta llegar a la Catedarl. Luego salió y se metió en San Miguel por la lluvia que le cayó, volverá a su Ermit de San Telmo el Domingo de Resurrección a las cinc de la tarde.
La Soledad salió sabiendo lo que iba a ocurrir, incluso cuando la Soledad iba por la calle del Ponce justo antes de revirar a calle Guadalete le cogió la lluvia, pero siguieron hacia adelante, al llegar a la altura de la Plaza del Banco retornaron a su Templo, a la Soledad le volvió a llover antes de entrar.
Así transcurrieron estas dos jornadas.
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